Pues ya iba siendo hora de volver por aquí ^^ Llegué el lunes por la tarde, y desde entonces hasta ahora poco he parado, más que nada porque quería aprovechar el tiempo con mi padre mientras estuviera en la ciudad.
Creo que me he adaptado fácilmente al ritmo de aquí, y aunque a mucha gente le agobia este tipo de caos, magnitud y prisas, a mí me encanta. Mi único problema es que me agobio y me preocupo mucho por este curso, es un miedo interno que ya superaré cuando empiecen las clases (espero).
Y nada, ahora estoy a gustísimo en el salón, desayunando y pasando momentos de amor con mi moribundo portátil. Que no le da la gana de ventilar, el muy estúpido. Como siga así lo cambio por otro ¬¬ (en cuestiones de relaciones con ordenadores y demás elementos tecnológicos puedo llegar a ser muy superficial).
Se me está acabando la tranqulidad porque tengo al portero llamando cada dos minutos T_T Os dejo unas fotos que hice cuando vine al piso hace unas semanas y encontramos las pertenencias de los antiguos dueños (lo que no sabemos es si los cuatro informáticos que vivían aquí el año pasado se travestían o es que antes que ellos vivía aquí Belén Esteban... )
El altillo misterioso, de 2m de profundidad y con capacidad
para cinco cadáveres y medio... ¡Y el palogancho!
El chándal de Belén Esteban
Las botas de drag queens de los informáticos
1 comentario:
"Las botas de drag queens de los informáticos"
jajajajajajajaja
No subestimes la conducta de un friki.
Ya nos contarás qué tal tu vida por la capital.
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