martes, 27 de octubre de 2009

Mi muro

Esas ilusiones, nunca dichas, siempre detrás de un muro cuidadosamente construido a lo largo de los años. Un muro que no deja pasar la luz ni el aire, cada día más alto y resistente.
Te pasas toda tu vida suplicando volver a ver la luz, derribar ese monstruoso muro y recuperar tus ilusiones. Pero en el momento en que una piedra cae, la luz te ciega. Te asustas y pierdes el control. Vuelves a coger la piedra... y lo cierras.
Después sientes alivio, furia, tristeza, decepción, culpabilidad... Quieres quitar esa piedra, todas y cada una de esas piedrecitas negras y frías. Las golpeas con toda tu fuerza pero no se mueven ni un milímetro. Tal vez esa piedra que volviste a colocar era la última piedra que se caería, tu última oportunidad. Desesperación y otra vez al dolor de la soledad, odiando a tu única compañía.
Paciencia. Poco a poco todo llega. Poco a poco las piedras caen.

1 comentario:

Inventario dijo...

Si quieres te ayudo =)
Puedo buscar un par de martillos de demolición.
Y si no, a golpes =)